Paz

Me disuelvo en la paz que necesito para crear, porque no entiendo ese afán de que la propia obra llegue a todo el mundo sino que ando pendiente de que mi obra merezca llegar a algunas personas. Desaparezco de los mundos revueltos, del ruido, de los versos gritados para que se escuchen por encima de los de los demás, porque sé que pocos, muy pocos tienen oídos capaces de captar otro sonido que su propia petulancia. Envuelvo mi ego en una manta, para que sude y pierda peso. Me voy un rato, unos días, unos meses, quien sabe si unos años, a trabajar, a trabajarme, a aprender algo, a crecer un poco. Pasaré de vez en cuando a quitar las telarañas. Paz.

Comentarios

  1. Siempre viene bien otra perspectiva, otro tiempo dentro del mismo.
    Buen viaje y feliz regreso, esperaremos sin duda. Saludos

    ResponderEliminar
  2. Buen viaje, siguiendo el sendero, el sendero del medio...

    ResponderEliminar
  3. Ramón, Helena, Diana, gracias por comentar :)

    Iré volviendo a poquitos.

    ResponderEliminar
  4. En una disolución parecida estoy, aunque distinta seguramente. Porque cada cual debe elegir los líquidos en los que disolverse. Pero volveremos, mientras haya donde desembocar.

    Beso grande y mucha paz.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Curiosidades tejeriles IV - la fibra de angora

Curiosidades tejeriles XII - Los grosores del hilo

Tres milagros