Cuaderno de tinta: Mediterráneo II
Sigo aprendiendo y disfrutando con la tinta. Usar las plumillas del abuelo tiene, además, ese plus de sentido que tanto me gusta, porque soy una sentimental y una petarda que a todo le busco una segunda vuelta simbólica y supertrascendente.
Veo bastantes áreas de mejora, eso también me gusta. Ya estoy ideando otras composiciones, en la misma línea que esta, que es bastante retadora: retratar la Naturaleza de la costa alicantina. Sí, cuatro plantas, mucha piedra, mucha luz... a simple vista. Limoneros, adelfas, cantueso, conejos, aves, insectos, hinojo, muchas hierbas que huelen muy bien, unos pocos pinos, palmeras y miles de cosas que todavía no he captado. Son los aromas y sonidos de mi infancia, esa luz deslumbrante sobre el mar y el olor de un pinar a pleno sol, el aroma dulzón del algarrobo y el canto interminable de las chicharras. Es el verano con el Avi en la playa, el paseo con la Yaya, la siesta y el sabor del alficoz. Lo dicho: un gran reto.
Comentarios
Publicar un comentario